La practicidad del salvaescaleras móvil T09 Roby

Fue un pariente del señor Luigi que sugirió la compra de un salvaescaleras móvil.

El señor Luigi nos cuenta que después del infarto, sus hijos, que viven cerca de su casa, querían hacerlo cambiar de casa.

«Yo vivo en esta casa desde hace más de treinta años, le tengo cariño y deseo quedarme en mi hogar. Aunque soy un anciano, en mi casa mando yo», nos dice bromeando.

«El salvaescaleras móvil me permite hacerme acompañar a la planta de arriba en un minuto, lo conducen mi hija o mi esposa, que recibieron instrucciones del asesor de Vimeccuando estuvo aquí.

Por suerte no son necesarios esfuerzos particulares, hay dos mandos, «arriba» y «abajo», en el manubrio, y el único esfuerzo que debe hacer el acompañante es mantener las manos en las empuñaduras, el resto del esfuerzo lo hace la máquina».

El testimonio de la hija Rosetta:

«Al principio teníamos temor sobre la utilización, ya que lo sucedido a nuestro padre sucedió tan rápido, pero después de hacer la prueba en casa, nos convencimos, y hoy contamos con una solución que nos satisface: papá no debe hacer esfuerzos que pueden ser dañinos y nosotros tenemos siempre la situación bajo control».

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